sábado, 17 de julio de 2021

 EL PAPEL USA EN LA II GM (1)

Los Estados Unidos fueron, de largo, el gran socio en los llamados aliados. Numéricamente lo fue la URSS, aunque cualitativamente lo fueron los USA. Pero cuando analizo datos y veo resultados ante el enorme esfuerzo realizado, me pregunto si valió la pena. No hablo en términos políticos, sino de personas y países y las consecuencias que aún hoy vivimos.

Pensemos que uno 200.000 norteamericanos murieron en el conflicto y más de 600.000 fueron heridos. Seguramente fue un peaje pequeño en comparación con otros países combatientes, pero después de la guerra hubo una cantidad enorme de crímenes atribuibles a shocks y desajustes tras las experiencia en combate de muchos ex-soldados. Muchos volvieron con secuelas mentales irreparables. También hubo una destrucción enorme de recursos naturales en madera, petróleo, mineral de hierro y otros metales y minerales, entre muchas otras cosas. Los USA emergieron de la guerra con una deuda impagable y todo eso nunca ha sido explicado en la historia de esa nación, ni en la historia en general. 

La gran pregunta ¿fueron esas pérdidas humanas y de material justificables o evitables? Desde el punto de vista militar, desde luego, la cruzada contra el Eje (y sobre todo contra Alemania), fue una victoria. Italia, Alemania y Japón fueron aplastados completamente. El poder USA en tierra, mar, aire y fábricas produciendo a tope, fue una contribución indispensable a esa derrota del Eje. 

Pero la guerra, no lo olvidemos, no es una prueba deportiva, en la cual la victoria es un fin en sí misma. Sólo puede ser justificada como el objetivo a alcanzar con un final deseable y positivo, y eliminar una amenaza intolerable a la seguridad nacional. Cuando uno preguntaba por los frutos de la victoria, incluso poco después del final de la guerra, las respuestas sonaban huecas y no convincentes. Imagínense las respuestas ahora cuando vemos el mundo que hemos heredado de aquellos vencedores en el mundo occidental…  

Consideremos los primeros resultados en términos de los objetivos confesados por los USA: la Carta del Atlántico y las 4 Libertades (el discurso de Roosevelt de 1941). No duden de que el fracaso fue absoluto e indiscutible. El presidente USA Wilson fracasó también en hacer prevalecer sus 14 puntos de paz tras la I Guerra Mundial. Pero ese fracaso puede ser considerado como un éxito brillante cuando uno investiga y compara entre los principios de la Carta del Atlántico y las 4 Libertades y las realidades del mundo de la posguerra. 

Tras la I Guerra Mundial, hubo algunos plebiscitos razonables, al mismo tiempo que arbitrariedades y arreglos territoriales injustos. Lo he comentado en algún artículo anterior. Pero el método utilizado para cambiar las fronteras tras la II Guerra Mundial, fue el de expulsar a poblaciones enteras con una bolsa y equipaje y muchas veces con muy poco equipaje… Ninguna guerra en el historia ha matado a más gente y ha dejado un legado  humano de miseria, raíces rotas, indigentes, desposeídos, etc.

Cerca de 14 millones de alemanes o de origen alemán, fueron trasladados desde el Este de Alemania en la línea Oder-Neisse, desde los Sudetes en Checoslovaquia y de pequeños asentamientos alemanes en Hungría, Yugoslavia y Rumania. Millones de polacos fueron expulsados del territorio llamado Línea Curzon y asentados en otras partes de Polonia, incluyendo las provincias robadas a Alemania. Cientos de miles de finlandeses abandonaron partes de Finlandia en manos de la URSS en las dos guerras de agresión que sufrió de la Rusia comunista. Al menos un millón de europeos del Este de variadas nacionalidades como polacos, rusos, ucranianos, yugoslavos, letones. lituanos o estonios, se convirtieron en refugiados que huían de la URSS y su tiranía. 

Ninguna de estas drásticas operaciones quirúrgicas de las fronteras europeas fue consultada libremente con las personas afectadas. Es evidente que cada uno de estros cambios hubiese sido rechazado por una gran mayoría en un plebiscito honesto. La mayoría de la población de la Polonia del Este o los estados bálticos, no deseaban ser ciudadanos sociéticos. Probablemente en la Prusia Oriental. Silesia y otros territorios étnicamente alemanes, preferían un gobierno alemán que no soviético o polaco. ¡Qué burla que se hizo de la primera de las cláusulas de la Carta del Atlántico! “No habrá incremento territorial” o “no habrán cambios territoriales con los que no estén de acuerdo de forma libre las personas afectadas” o bien “el derecho de todas las personas para escoger la forma de gobierna bajo la cual vivirán”. Todo una farsa.

El resto de clausulas no tuvieron mejor suerte. Las restricciones impuestas a la industria , el comercio y las navieras de origen alemán y japonés, no estaban en línea con la promesa que decía “para promover el disfrute de todos los estados, grandes o pequeños, vencedores o vencidos al acceso, en igualdad de condiciones, al comercio y las materias primas del mundo”. Roosevelt y Churchill cantaron el famoso “Adelante Soldados Cristianos”, durante su encuentro del 10 de Agosto de 1941, a bordo de un buque de guerra británico anclado en las afueras de Newfoundland.

En el enorme conflicto entre las potencias del Eje y el Imperio Británico y la URSS, los USA eran aún, oficialmente, neutrales. Sin embargo, y violando tanto las leyes internacionales y las promesas repetidas a la población americana. Roosevelt ya había involucrado a los USA en la guerra. En ese encuentro con Churchill, comprometió públicamente a su país para “la destrucción final de la tiranía nazi”. Pocas semanas antes, y bajo sus órdenes , los USA ya habían ocupado Islandia.

Churchill y Roosevelt anunciaron la “Carta del Atlántico”, que proclamaba “el derecho de la gente para escoger la forma de gobierno bajo la que querían vivir”. Los líderes aliados nunca fueron sinceros en sus promesas. Inglaterra ya las estaba violando en el caso de la India y otros dominios imperiales y más tarde ambos las traicionarían en el caso de Polonia, Hungría y otras naciones europeas entregándoselas al tirano de Moscú. La terrible destrucción de la guerra y la paz vengativa, no ayudaron a asegurar “para todos, mejoría en los niveles de trabajo, avance económico y seguridad social”. 

En 1950, cinco años después del final de la Segunda Cruzada “todos los hombres de todas las tierras” no estaban viviendo “sus vidas en libertad y lejos del miedo” ni estaban “todos los hombres atravesando el alta mar y océanos sin obstáculos”. La octava y última claúsula de la Carta del Atlántico dice algo totalmente naif “Para que los amantes de la paz no soporten la aplastante carga de los armamentos”. Pero esa carga fue más aplastante de lo que había sido antes de la cruzada. Los “amantes de la paz” dedicaron ingentes cantidades de dinero de sus salarios en impuestos para la preparación de la guerra. Al final, todas las promesas de la Carta del Atlántico se evaporaron en la fantasmal niebla atlántica.

Ni siquiera las 4 Libertades de Roosevelt tuvieron importancia apreciable e. La construcción del mundo de la posguerra. Me gustaría recordar qué eran esas cuatro libertades del presidente americano: Libertad de Expresión, Libertad de Religión, Libertad del miedo y Libertad de Deseo. Pero una de las consecuencias principales de la guerra fue la enorme expansión del poder del comunismo en la Europa del Este y en Asia. Difícilmente puede argumentarse que el comunismo y el socialismo hayan contribuido para aumentar la libertad de expresión, religión, miedo o deseo de los pueblos bajos sus garras asesinas. 

La suerte del cardenal húngaro Arzobispo Mindzenty, uno de los líderes  religiosos de Hungría y de los muchos sacerdotes que fueron arrestados y asesinados en los países satélites de la URSS. Ello ofrece una prueba elocuente de los que fue el comunismo. Por ello, no hay una relación visible entre la Carta del Atlántico y las 4 Libertades y el tipo de mundo que emergió tras la guerra. Woodrow Wilson luchó por sus 14 puntos tras la I Guerra Mundial. No tengo noticias ni pruebas de que Roosevelt ofreciese objeción alguna a las muchas y constantes violaciones comunistas y propias contra sus propuestas de la guerra y pos-guerra.

Algunos argumentan de que ambos documentos aliados trataban sobre la supervivencia nacional de UK y USA. Sin embargo, no hay prueba alguna de que Alemania y Japón hubiesen trabajado o preparado sobre una supuesta invasión contra los USA o el continente americano.

3 comentarios:

  1. Naturalmente que hubo grandes beneficiados, los mismos que ahora: La Banca.
    Ya se sabe, como reza el dicho: "La Banca siempre gana".
    Y es cierto, de no ser así, casinos, bancos y demás casas de putas habrían dejado de existir hace años, por contra, cualquiera puede constatar que sucede justo lo contrario.

    En cuanto al imperio de la democracia y el bienestar del pueblo soberano consultándole cosas trascendentales para el devenir de la sociedad...
    Me río por no llorar, jamás han consultado nada de eso, ni se les pasaría por la cabeza hacer un referendum sobre si los ciudadanos (Traducción: siervos pagadores de impuestos) están de acuerdo en aceptar millones de inmigrantes y darles dinero o vivienda, o si estamos de acuerdo en el rescate bancario (Traducción: mantener los beneficios de empresas privadas) a costa del Erario Público.
    Quienes deciden estas cosas no se arriesgarían a recibir un "No", simplemente hacen lo que se les dice, como, por ejemplo, la Agenda 2030. Lo va a cambiar todo y va a afectar a todos, ¿harán una consulta popular?. No, simplemente te dirán que te pongas en tal o cual posición, te meterán el palo astillado por el culo y lo más triste: la mayor parte de la gente estará agradecida y pedirá más, tal y como lo ha hecho en los últimos 40 años.

    Un saludo.

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  2. Pues si, que a los lobbys sionistas del armamento y finanzas que gobiernan en USA, les importa mucho las victimas de las guerras, o que un niño en una escuela de yanquilandia, cometa una masacre, con un rifle automático que compró por correo.
    El caso es gracias a la NAT9 y el plan Marshall, Europa es una colonia ocupada militar y económica del anglo sionismo, que fotocopia sin cesar billetes verdes, cuya factura, pagamos nosotros.
    Es innegable que la Prusia Oriental simpatizaba por Hitler, pero parece ignorar, que fue la presión popular, harta de concesiones a Hitler, la que hizo que la cámara de los Lores, revocara la cesión del corredor polaco de acceso a Danzing, lo que desencadenó las posteriores convulsiones.
    Sobre lo demás, rodo es subjetivo y dependiente de los intereses de clase, de cada uno.

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  3. Hola, totalmente de acuerdo con DG y su análisis. Jamás han pedido democraticamente al pueblo si queríamos una sociedad multirracial, ni lo harán y la Agenda 2030 igual. La aplicarán y punto.
    No es que simpatizasen con Hitler, Anónimo, es que eran alemanes y estaban siendo perseguidos por los polacos.
    La guerra fur provocada contra Hitler, de eso no tengo duda alguna.
    Saludos, Felipe Botaya

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